Con el anuncio de Rappi de conquistar el mercado financiero con el lanzamiento de un banco nativo digital de la mano de Davivienda, vale la pena recordar los pasos que llevaron a esta aplicación de domicilios a meterse en el negocio de la bancarización.
La historia de Rappi inicia en la cabeza de tres jóvenes colombianos, Simón Borrero, Sebastián Mejía y Felipe Villamarín, quienes en 2015 deciden crear una empresa llamada ‘Grability’ para que los usuarios pudiesen hacer sus compras de una forma más intuitiva y cercana, sin saber que esta se convertiría en la puerta de entrada para darle forma a Rappi.
“En ella, había un campo abierto donde la gente escribía sus sugerencias. De pronto empezaron a ver que pedían cosas como hamburguesas, crepes, medicinas y mercado. Pero también se dieron cuenta de que la gente pedía favores. Entonces, la idea del Rappi salió de los propios usuarios”, cuenta Matías Laks, gerente general de Rappi en Colombia.
Luego de bautizar a la compañía con el nombre actual y consolidarla como una aplicación móvil, con 10 empleados, incluyendo los fundadores, Borrero, Mejía y Villamarín, decidieron ir en busca de clientes. Para ello, montaron dos stands en Bogotá, uno en el barrio Chicó y otro por la calle 90 en la que le regalaban donas a todo el que descargara la aplicación, sin pensar que cinco años después lograrían acumular más de 20 millones de usuarios activos en la región.
“Rappi regaló miles de donas y así comenzó una historia que hasta hoy ha cambiado las dinámicas de usuarios, comercios y domiciliarios”, añade Laks.
Hoy, la compañía tiene presencia en más de 200 ciudades y ha logrado conquistar a mercados latinoamericanos como Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Costa Rica, Uruguay, Perú y Ecuador con una valorización de US$1.000 millones.
Tras esto, la app continuó su crecimiento, y en 2019 apareció un nuevo anuncio: Rappi entraría en alianza con el Banco Davivienda para incursionar en el mundo de las transacciones digitales. Para ese mismo año, los conceptos de billetera virtual, fintechs y banca digital empezaban a ser más familiares para los usuarios, cuyo catálogo de opciones nacía con aplicativos como Daviplata, del mismo banco aliado, o Nequi de Bancolombia.
Las compañías confirmaron su intención de lanzar RappiPay en marzo de 2019, una aplicación que permitiría a los usuarios realizar transferencias de dinero, pagos en comercios por código QR, seguridad en las transacciones con código PIN e incluso, serviría para enviar remesas.
“La casita roja entra a vivir en el súper app de Rappi. En la parte de arriba del app, los usuarios van a encontrar su cuenta, a la que se le puede meter dinero, gratis, haciendo una transferencia desde cualquier banco. Esa plata, que no tiene ninguna cuota de manejo, la puedes sacar en cualquier momento, la puedes usar en Rappi y para pagar en comercios”, comentó en su momento Simón Borrero, CEO y cofundador de la empresa.
Desde su lanzamiento, el producto digital de las dos compañías empezó a tomar fuerza y le dio paso a la aplicación para explorar nuevos segmentos del mercado tecnológico, comercial y financiero. En el último año, RappiPay registró más de 20 millones de transacciones y ya tiene más de 660.000 usuarios activos.
Luego, en octubre de 2020, las compañías vuelven a anunciar un nuevo beneficio de su alianza. Esta vez, los usuarios de Rappi podrían acceder a una tarjeta de crédito Visa sin cuota de manejo, asimismo, podrían recibir 1% de cashback en cada una de las compras realizadas, contar con un programa de referidos y un ‘personal banker’ que atendería de forma personalizada a cada uno de los usuarios.
“En estos dos años de alianza hemos logrado que los clientes de RappiPay tengan toda la tecnología y la innovación de Rappi con la experiencia y la solidez de Davivienda. Además, hemos visto cómo muchas personas se han bancarizado y han visto en nuestros servicios una oportunidad para acceder a un mundo financiero con beneficios premium”, comentó el gerente general de Rappi para Colombia.
Con un beneficio mutuo Rappi y Davivienda fueron fortaleciendo su matrimonio, con el que, además de ayudar a los usuarios a tener un consumo más sencillo y asequible, empezaron a impulsar la bacarización de personas que habían permanecido fuera de ese mundo. Este año, la alianza dio un paso más arriesgado apuntándole a la banca digital con una inversión de US$50 millones.
“Desde el día uno, Rappi se ha preocupado por crear soluciones que les faciliten la vida a todas las personas, tanto a usuarios como a aliados. El paso que damos hoy responde a seguir buscando soluciones para todos los colombianos de la mano de aliados estratégicos y la innovación, para acercar cada vez más a los usuarios a servicios bancarios que antes eran limitados y de difícil acceso”, precisa Laks.
Entre los beneficiarios de esta nueva plataforma estarán los rappitenderos a quienes, según el gerente de la compañía, se les dará acceso a crédito sin tener aún un historial crediticio. Además, la compañía espera ayudar a los restaurantes que tienen un historial en Rappi, para que puedan acceder a un crédito a menores tasas.
“Buscamos ser el mejor aliado de todos, desde los restaurantes hasta los rappitenderos, y acercarlos a servicios que antes eran de difícil acceso, desde sus celulares”, concluyó Laks.
La app también formalizó su alianza con Viva Air para vender tiquetes
Otra de las alianzas estratégicas que anunció la aplicación este mes fue la que hizo con la aerolínea Viva Air, que le permitirá a los viajeros comprar sus tiquetes aéreos por medio de la aplicación. La compañía señaló que las aerolíneas de bajo costo están ganando un rol cada vez más importante para los consumidores, con lo que decidieron incluirla en el ecosistema de Rappi Travel. En este segmento, la compañía ofrece más de 250.000 hoteles a nivel mundial y contacto con las aerolíneas del mundo.
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